Salud y bienestar infantil: ¿cómo humidificar la habitación de un bebé?
Para vivir sanamente en una casa es necesario gozar de un nivel óptimo de humedad. Esto es válido tanto para adultos como para niños pequeños. De hecho, la alta humedad puede dañar la salud del bebé. Sin embargo, muchos padres descuidan este punto.
Dado que se supone que el bebé pasa la mayor parte del tiempo en su dormitorio, es más que imprescindible tener en cuenta este nivel de humedad. Como probablemente ya sabes, el sueño juega un papel importante en el crecimiento de un pequeño. Sin embargo, la humedad puede afectar en gran medida la calidad del sueño.
Para mantenerse sano, tu pequeño debe disfrutar de un sueño reparador y tranquilo. Además, el cuerpo humano, especialmente en el momento del nacimiento, recupera energía durante el sueño. Por tanto, es fundamental controlar la humedad de la habitación. Descubra en este artículo cómo y por qué es importante humidificar la habitación del bebé.
Razones para humidificar el dormitorio de tu bebé
Humedecer el área donde duerme el bebé es esencial por muchas razones. Para mantener una salud excelente, un bebé debe disfrutar de un ambiente saludable en su dormitorio. Para ello, como padres, debéis vigilar a toda costa el nivel de humedad del aire. En una habitación dedicada a un bebé, la temperatura ideal recomendada varía entre 18 y 21°C.
Un niño pequeño no es capaz de regular adecuadamente su temperatura. Por este motivo, debes asegurarte de que la temperatura ambiente sea la óptima. Además, en la temporada de verano, las altas temperaturas ayudan a reducir el nivel de higrometría del aire, es decir, el nivel de humedad del aire. Cuando se encuentra en estado gaseoso, el aire carece de agua.
En invierno, es el dispositivo de calefacción que utilizas el que ayuda a reducirlo. Sin embargo, cuando el aire es demasiado seco, reseca las membranas mucosas del pez lobo. Esto puede provocar irritación pulmonar, problemas para dormir, congestión nasal y ataques de tos. Para evitar todas estas enfermedades, bajo ningún concepto descuides el nivel de humedad.
Hay que destacar otros puntos. Cuando el aire de la habitación de un bebé es seco favorece la aparición de varios problemas de salud. En primer lugar, el aire seco puede obstruir las fosas nasales del pequeño. Lo que dificultará la respiración. Además, la baja humedad del aire favorece la aparición de diversas afecciones: bronquitis, conjuntivitis. Y eso no es todo, reseca la piel del niño.
Así que, para remediar todo esto, asegúrate de mantener un nivel de humedad entre el 40% y el 60%. Para ayudarle, puede utilizar dispositivos de medición. Al mismo tiempo, no olvides ventilar bien la habitación y, sobre todo, prohibir el uso de un dispositivo de calefacción adicional en la habitación del bebé.
En cualquier caso, recuerda una cosa: cuando el nivel de humedad relativa supera el 60%, el aire es propicio para la proliferación de bacterias. Esto aumenta el riesgo de infección en el niño pequeño. En una habitación demasiado húmeda, los bebés pueden sufrir problemas respiratorios como el asma. Ten en cuenta que es más que imprescindible humidificar la habitación de tu angelito, pero no en exceso.
Soluciones sencillas para humidificar el aire de una habitación
Así como hay varias maneras de iluminar adecuadamente la habitación de un bebé, en particular mediante una lámpara de noche o una lámpara de noche montada en la pared , diferentes soluciones sencillas también permiten humedecer el aire. Entre ellas, mencionaremos en primer lugar la instalación de plantas de interior en las estancias de la casa. No coloques uno directamente en la habitación del bebé, sino en el pasillo que conduce a su habitación. Gracias a que las hojas de las plantas liberan vapor de agua, el espacio mantiene un buen nivel de humedad. Sin embargo, tenga cuidado de no elegir una planta alergénica.
En segundo lugar, otra opción es dejar la puerta del baño abierta después de ducharnos. En el baño, el aire se llena de agua del entorno. Alternativamente, puedes colgar la ropa húmeda en el dormitorio. Esto ayudará a aumentar los niveles de humedad. Mismo método, puedes sumergir una toalla en agua. Escúrralo y colóquelo cerca del radiador del dormitorio.
Otra técnica natural: colocar un gran recipiente con agua en la habitación. Esto ayuda a suavizar el aire de la habitación. Por otro lado, para humidificar aún más la habitación, instala un recipiente con agua caliente en el espacio del bebé. Finalmente, el saturador puede resultarte muy útil. Cuelga este depósito cerámico en el radiador para humidificar el aire, gracias a un proceso de evaporación.
Regular el nivel de humedad en la habitación de un bebé: ¿cómo operar?
Como no puedes comprobar el nivel de humedad en una habitación si no tienes herramientas, considera comprar un higrómetro. Este pequeño dispositivo te ayudará a definir el nivel de humedad de una habitación en muy poco tiempo. Dependiendo del resultado que muestre el dispositivo, se adoptarán las acciones adecuadas para asegurar la regulación del nivel de humedad. De esta forma, el sueño nocturno de tu querubín será de excelente calidad.
En caso de que veas un nivel superior al 60%, esto significa que la habitación está más húmeda de lo necesario. Se recomienda entonces equiparse con un deshumidificador, especialmente si la habitación no dispone de aire acondicionado. El deshumidificador y el aire acondicionado ayudarán a reducir la humedad en la habitación. Esto secará el aire de la habitación y reducirá la aparición de moho, que crece rápidamente en lugares húmedos y congestionados.
Si, por el contrario, el aire está demasiado seco, equípese con un humidificador. Esto es para aumentar el nivel de humedad en la habitación. Un aire adecuadamente húmedo ayudará al niño pequeño a respirar mejor. Además, esto evita que tu garganta se seque por falta de humedad.
Centrándonos en el humidificador de aire para bebés: dispositivo ideal para humidificar su habitación
Para humidificar la habitación de un bebé, nada mejor que utilizar un humidificador de aire especialmente diseñado para bebés. Este dispositivo suele ser adecuado para una habitación con una superficie de 35 a 50 m². El humidificador de aire contiene un pequeño tanque que libera pequeños fragmentos de líquido. Su principio de funcionamiento es relativamente simple. El dispositivo libera vapor al aire hasta que no queda más agua en su depósito. A continuación se detallan algunos puntos esenciales que debe conocer sobre el humidificador de aire para niños.
Los diferentes tipos de humidificadores de aire.
Existen algunas variantes de humidificadores de aire, en este caso el de vapor caliente y el de vapor frío, sin olvidarnos del humidificador de aire por ultrasonidos. El humidificador de aire de niebla fría le permite bajar la temperatura cuando es demasiado alta. Mientras que el de vapor caliente se basa en el mismo principio que una cacerola llena de agua hirviendo. Tiene una resistencia que hierve el agua. El vapor que emerge humedece el aire de la habitación. Gracias a este método, podrás beneficiarte de una humidificación sin bacterias.
Si tienes que elegir entre estos dos modelos, elige el humidificador de vapor frío, porque a diferencia del modelo de vapor caliente, este te protege de cualquier riesgo de quemarte. Además, con el aparato de vapor caliente la temperatura del aire ambiente puede aumentar considerablemente. Lo cual puede resultar bastante peligroso para el bebé.
En cuanto al humidificador ultrasónico, es sin duda el modelo ideal para la habitación de un bebé. Dispone de una fina placa metálica vibratoria. Al contacto, las moléculas de agua se desintegran para convertirse en finas gotas microscópicas. Los ultrasonidos producen una fina niebla que contiene fragmentos de agua que se difunden en el aire ambiente gracias a un ventilador silencioso. Estas partículas de agua se evaporan instantáneamente, humedeciendo eficazmente el aire.
Algunos consejos para utilizar el humidificador de aire
Para aprovechar al máximo el uso del humidificador en la habitación de su hijo, siga las recomendaciones a continuación. En primer lugar, en lugar de agua caliente, utilice agua tibia en su humidificador. Esto es para garantizar mejor la seguridad de su bebé. Por supuesto, el agua caliente es más conveniente, excepto que su bebé podría quemarse si el humidificador se cae accidentalmente.
Siempre con el objetivo de hacer seguro el uso del humidificador de aire, asegúrate de que esté fuera del alcance de tu pequeño. Preferiblemente, coloque el dispositivo al menos a 10 m del bebé. De esta forma evitas cualquier posible riesgo de que tu hijo inhale las toxinas que podrían desprenderse del humidificador. Para optimizar el nivel de humedad en todos los rincones de la habitación, coloque el dispositivo de manera que esparza las partículas de agua hacia el centro de la habitación. Además, instálalo en una esquina elevada, para llegar a todos los rincones de la habitación.
En definitiva, un humidificador es un instrumento imprescindible para mantener un nivel óptimo de humedad en la zona de descanso del bebé. Aún así, no es obligatorio dejar el humidificador encendido las 24 horas del día, en realidad sólo hay que asegurarse de regular el nivel de humedad de la habitación. Tenga en cuenta también que la frecuencia y la duración del uso varían dependiendo del clima al que esté sujeta su casa. Pero por lo general, conviene encender el humidificador al menos 4 veces al día, sobre todo durante el invierno cuando se siente mucho el frío.
La última palabra
Si las luces nocturnas montadas en la pared resultan eficaces para iluminar el dormitorio del pequeño, el humidificador de aire será beneficioso para mantener el aire puro y saludable en el dormitorio del niño. Si el aire en la habitación del angelito es demasiado seco, sin duda se perturbará su sueño. Sobre todo porque el aire seco provoca molestias en algunos bebés. Así que recuerda esto: cuando los bebés lloran en mitad de la noche, suele deberse a los niveles de humedad. Se recomienda comprobarlo periódicamente para poder actuar en consecuencia.
Como habrás comprendido, humidificar la habitación del bebé es fundamental para su salud y su sueño. Para ello, utilizar un humidificador de aire especial para bebés te será de gran ayuda. Así que un consejo a los padres de futuros bebés: antes de la llegada de tu bebé, piensa ya en todo el equipamiento que necesitas tener en casa para que tu bebé viva tranquilo y con la mayor comodidad.